Símbolos, Cantidades y Mensajes
Durante la época en que asistía a las entrevistas como aspirante para ingresar a la Masonería concurrí a una ceremonia que se llevó a cabo en la Gran Cámara por motivo de la celebración del Día Masónico Nacional, que corresponde a la fecha de nacimiento del Prócer de la Independencia don Francisco de Miranda. Llamó mucho mi atención el arreglo de los muebles en la Gran Cámara. El piso estaba formado por cerámicas cuadradas blancas y negras. Al indagar hallé que esto figura simbólicamente la dualidad, que se halla presente en todo. Sin ser demasiado prolijo podría citar los siguientes pares de opuestos que representan esta dualidad: luz y tinieblas, amor y odio, reflejo y adsorción, vida y muerte. Todos ellos son inherentes en la Naturaleza. Al fondo de la Gran Cámara pude observar una Escuadra y un Compás con una letra “G” en el centro; después, gracias a mis investigaciones, entendí que se refería a “God” (Dios). Me pregunté por qué una “G” y no una “D”. La respuesta más obvia que he conseguido es que la Masonería moderna tuvo su origen en Inglaterra, donde se habla el idioma inglés. De igual forma pude observar la curiosa presencia de unas triangulaciones entre quienes son llamados dentro del templo Venerable Maestro, Primer Vigilante y Segundo Vigilante. Al unir los puntos donde éstos estaban ubicados se forma un triángulo, que indica la existencia de un plano, pues es sabido que tres puntos que no están sobre una misma línea recta forman un plano. Al reflexionar sobre la simbología Masónica, encontré que los vértices de este triángulo (la Sabiduría, representada por el Venerable Maestro; la Fuerza, por el Primer Vigilante; y la Belleza, por el Segundo Vigilante) dan vida a ese plano simbólico en el cual deben efectuarse las Trabajos. Los escritorios del Primer Vigilante y del Segundo Vigilante son triangulares, igual que una mesita situada en el centro, la cual es llamada Ara. Una forma interesante de obtener triángulos es a través de un círculo y éste es la proyección de una esfera, figura geométrica tridimensional más perfecta, sobre un plano. Si se mantienen tres puntos en los bordes del círculo y se unen con líneas rectas, siempre se forma un triángulo; que en algunos casos resulta escaleno, rectángulo, isósceles o equilátero. Todos estos tipos de triángulos tienen la particularidad de que sus ángulos internos suman ciento ochenta (180) grados y al sumar los números que componen esta cifra se obtiene lo siguiente: 1+8+0=9. El nueve es múltiplo de tres. Comentaré más adelante sobre la simbología de este número. Al restar al guarismo central (8) los guarismos de los extremos (1 y 0), se obtiene lo siguiente: -1+8-0=7. El siete es un número con una simbología interesante, que comentaré también más adelante. De igual forma, el tan interesante número 180 representa tres cosas: el uno (1), el ser; el (8), el infinito, y el cero (0), la nada. También el número 180 es tres (3) veces sesenta (60) o dos veces noventa (90).

De igual forma, pude ver una serie de escalones para llegar al fondo de la Gran Cámara. En este lugar, el más alto de la Gran Cámara, se encuentra el Venerable Maestro. Llamó mucho mi atención el número de escalones, para llegar allí, por ser siete (7), y mis reflexiones e investigaciones posteriores, me llevaron a develar y establecer las siguientes analogías: la semana tiene siete días, el mundo desde el punto de vista de la Sagrada Biblia fue creado en siete días (seis de creación y el séptimo de descanso), el Arco Iris tiene siete colores, los Pecados Capitales son siete (Lujuria, Gula, Avaricia, Pereza, Ira, Envidia y Soberbia). Esto último se me hizo bastante curioso, porque al ascender por la escalera (sobre los Pecados Capitales) se llega al sitio donde está la máxima autoridad en la Cámara; quien es conocido como el Venerable Maestro, que representa la Sabiduría.

En el Catecismo del REAA, para el Grado de Aprendiz, encontramos la siguiente pregunta: “¿Qué entendéis por una Logia Perfecta?” Se responde así: “Tres Maestros forman una Logia Simple, cinco una Logia Justa y siete la hacen perfecta”. Aquí hallamos otra vez el número siete (7).

Al seguir indagando sobre el número siete (7) hallé que son siete (7) las notas musicales de la Escala Natural: Do, Re, Mi, Fa, Sol, La y Si. De esto se desprende que la música apropiada es un elemento que decora muy bien la Logia, generando un ambiente sereno y de relajación. Siete (7) son los Chakras en el cuerpo humano y siete (7) son los sacramentos en la Tradición Cristiana: Bautismo, Confirmación, Eucaristía, Penitencia, Unción de los enfermos, Matrimonio y Orden Sacerdotal. El siete (7) a su vez está formado por la suma de tres (3) y cuatro (4). El número tres (3) representa algunos tríos simbólicos que se encuentran en la Logia: Salud-Fuerza-Unión, Libertad-Igualdad-Fraternidad, Aprendices-Compañeros-Maestros. Estos Hermanos, que conforman la Logia, tienen una visión de ella por el nivel de conocimiento que poseen y que son aptos para manejar. En la tenida en Grado de Aprendiz, tres (3) son los golpes de Mallete dados por el Venerable Maestro, el Primer Vigilante y el Segundo Vigilante, antes de abrir los Trabajos. Tres (3) son las Estrellas en el Ara. Tres (3) son los toques que se realizan a las puertas de la Cámara cuando un Querido Hermano llega después de comenzada la Tenida. Tres (3) son las herramientas del Aprendiz (la Regla de 24”, el Mazo y el Cincel). Tres (3) son las Luces de la Logia: el Venerable Maestro, el Primer Vigilante y Segundo Vigilante. Tres son las Grandes Luces de la Masonería: la Escuadra, el Compás, y el Volumen de la Luz Sagrada, la Biblia. En la Tradición Cristiana encontramos el número tres (3) reflejado básicamente en el Misterio de la Santísima Trinidad: Padre-Hijo-Espíritu Santo. También está reflejado en la conformación del hombre: Cuerpo-Alma-Espíritu. El número cuatro (4) representa los elementos básicos para el funcionamiento de la Naturaleza: Tierra, Agua, Aire y Fuego. Sin la presencia de éstos la vida como la conocemos no sería posible. Los ciclos lunares se cumplen en veintiocho (28) días, que representan cuatro semanas. El número veintiocho (28) contiene al siete (7) cuatro veces y al cuatro (4) siete (7) veces. Las estaciones del año son cuatro (4): primavera, verano, otoño e invierno. El siete (7) es producto de la suma de tres más cuatro (7=3+4). Resulta éste uno de los máximos representantes de aquello que al pensarlo resulta “inmenso, en cierto modo oceánico”, en pocas palabras, el Gran Arquitecto del Universo, a Quien en una Logia muy bien decorada se dedican los Trabajos Seguramente existen muchas más analogías que pueden referirse en relación al número siete (7), pero mi propósito es utilizar estas pocas, para destacar como el número siete (7) resulta especial en la decoración del templo, visto desde el punto de vista esotérico. Es menester hacer notar que nuestra Respetable Logia, lleva a cabo, por circunstancias fuera de nuestro control, sus trabajos el día domingo, que es precisamente el séptimo (7) día de la semana.

Recuerdos de mis primeras Tenidas
Volviendo al tema de la Decoración de la Logia me remonto a mis primeras Tenidas. Recuerdo con mucha curiosidad seis (6) velones llamados Estrellas, una Escuadra, un Compás, el Volumen de la Luz Sagrada, el Toque de Grado, el Sol, la Luna. Al Occidente hay dos Columnas, llamadas J… y B…, y al Oriente está la Columna del Venerable Maestro; la cual no es visible, pero existe. Al reflexionar he notado que estas tres (3) Columnas son las que realmente sostienen la Logia. Los Aprendices, Compañeros y Maestros forman parte de ellas, cada cual con su grado de conocimiento y compromiso con la Masonería; que, bien entendida, es un “estilo de vida” y la acción de éste es un Arte con el cual la orden Masónica queda muy bien decorada ante los ojos del que todo lo ve, todo lo siente, todo lo escucha, cuando se pone Orden en el Caos. A los lados de las bases de las Columnas B… y J… están dos (2) piedras: una piedra sin forma, conocida como Piedra Bruta, y la otra en forma cúbica. Aquélla es un símbolo importante para el Grado de Aprendiz, porque los esfuerzos de éste en la masonería girarán especialmente en torno a esa Piedra, pues debe tallarla hasta convertirla en Piedra Cúbica.

El dominio de los vicios y de las pasiones es un paso en positivo en el tallado de la Piedra Bruta. Cada paso en negativo, como permitir que los vicios y las pasiones nos dominen, es seguir agregando imperfecciones a la piedra, tal vez robusteciéndolas en el peor de los casos.

Al pensar en el tema de la Decoración de La Logia, las primeras ideas que me surgieron fueron las siguientes: interpretarla como el cuerpo humano o como una representación del universo. Si profundizamos ambas cosas son las mismas.

Manly Palmer Hall en su libro Melquisedec y el Misterio del Fuego comenta lo siguiente:

…El cuerpo del hombre es un templo viviente, y él es el supremo sacerdote, colocado allí para mantener la Casa del Señor en orden. Los templos antiguos fueron diseñados calcándolos del cuerpo humano, como se comprobará estudiando los planos del santuario de Karnak o los de la iglesia de San Pedro en Roma. Y si los lugares de iniciación eran copias del cuerpo humano, los rituales que se realizaban en las distintas cámaras y corredores simbolizan ciertos procesos que tienen lugar también, en el cuerpo humano. (HALL, p1)

Después de recordar lo anterior, leerlo y releerlo, simplemente me dediqué a pensar, pensar, pensar… y comencé a entender la importancia del Silencio. Especialmente en aquellas palabras dichas por el V.·.M.·. al inicio de la tenida: “Silencio y en Log.·.” Noté que haciendo el ejercicio del Silencio pude sentir lo que verdaderamente debía desarrollar con la Plancha de Arquitectura que se me había asignado. Así, comencé a darle importancia a aquella clasificación de la Masonería que hallé en mis investigaciones: “Masonería Operativa” y “Masonería Especulativa”. En sus inicios la Masonería estaba asociada a la albañilería. Un albañil maneja el Mazo, el Cincel, la Escuadra y el Nivel y la Plomada. El albañil es un Constructor, y si domina muy bien su oficio se puede catalogar de Artesano. Por sus obras será respetado el oficio. En pocas palabras, decora el oficio ante los ojos de los demás.

La Masonería moderna es especulativa. Con ésta se consideran como símbolos las herramientas de los albañiles ya mencionadas. Razón e Intuición, son formas de acceder a verdades con “v” minúscula que utilizamos para el desarrollo de los trabajos que hacemos en las Tenidas. El raciocinio es necesario, pero no puede ser visto estrictamente como el elemento de más importancia. Sin embargo, es un punto de apoyo para poder seguir el camino a la liberación. La intuición es igualmente un punto de apoyo y nos guía durante los trabajos individuales y en Logia. También sirve en nuestro desenvolvimiento en la vida. Apreciamos la intuición en el amor, en la misericordia, en la creencia en el Gran Arquitecto del Universo; para Quien servimos de instrumentos en la ejecución de su Plan. Ambas formas, razón e intuición, son esclarecedoras y decoran al Masón.

Decoración y Decoro
Según el Diccionario Larousse Ilustrado la palabra “Decoración” tiene el siguiente significado:

f. Acción de decorar: la decoración de un salón • Arte del decorador

Cosa que decora: decoración de gusto

Representación del lugar en que pasa la escena del teatro

Acto de decorar: la decoración de la lección

Los significados previos permiten ver la diversidad de formas bajo las cuales se puede entender lo que es “Decoración”. Podríamos hablar de la decoración de la Logia desde el punto de vista exotérico, únicamente visual, como el arreglo de una serie de elementos que resultan interesantes. También tienen innumerables interpretaciones, como símbolos que son. Éste es el punto de vista esotérico, hacia el cual toda Logia bien decorada siempre debe apuntar. Es posible, además, apreciar la decoración de la Logia a través del olor de los inciensos utilizados, porque lo que consideramos un buen olor produce relajación y frescura.

De igual forma en el Diccionario Larousse Ilustrado la palabra “Decoro” tiene el siguiente significado:

m. (latín decorum). Honor, respeto que se debe a una persona

Recato, circunspección: hablar con decoro

Pureza, honestidad: el decoro de una joven

Decencia

En Arquitectura: arte de decorar los edificios

Al observar esta última definición, mis pensamientos se trasladan a lo que aprendí en mis cursos profanos de Historia de Venezuela, a aquella gran obra de personas que tuvieron relieve en el proceso histórico de Venezuela: Simón Bolívar, Francisco de Miranda, José Tadeo Monagas, José Gregorio Monagas, Antonio Guzmán Blanco, Simón Rodríguez, José Antonio Páez, Carlos Soublette, Manuel Felipe Tovar y Tovar, Santiago Mariño, y muchos más.

Hay muchos otros Queridos Hermanos, que decoran la Orden Masónica por sus obras en el mundo profano e iniciático. Las obras en el mundo profano son la decoración que se ha destacado en el tiempo y es la que debemos de levantar, porque como dijo Mahatma Gandhi: “nosotros debemos ser el cambio de lo que deseamos ver en el mundo”. Si no lo intentamos sólo podemos hablar de “la Decoración en la Logia” como un conjunto de elementos que tienen cierta disposición en el espacio. Hay que penetrar el esoterismo dentro del esoterismo. Hay que hacer que el “verbo se vuelva carne”, en pocas palabras, volver a la “Masonería Operativa” y ver cómo podemos transmitir la rectitud de la Escuadra, la versatilidad del Compás y el respeto por el Silencio a nuestros Queridos Hermanos, y al mundo profano.

Referencias Bibliográficas

– Apertura de los Trabajos. Autor: León Zeltis.
      Fecha de Consulta: 15/11/2011.

– Diccionario Larousse Ilustrado. Ediciones Larousse. 1992

– Palmer H., Manly. Melquisedec y el Misterio del Fuego.
      Editorial Kier.